Reseña/opinión: Donde habitan los ángeles

Por: Diego Gabriel Sánchez Cruz

"Vivir realmente la vida, el tomar en serio la responsabilidad de vivir, nos exige mucho más que respirar y comer. Es nuestro deber superar los obstáculos y seguir adelante."—Claudia Celis

ANÉCDOTA: Hay libros que generan conexiones especiales con las personas. Cuando una persona te presta un libro que le gustó mucho, de cierta manera también te está compartiendo una parte de su vida. Puede ocurrir que la persona algo leyó, alguna emoción sintió, que necesita de alguien con quién conversarlo. A veces, sabes que, a quien entregarás el libro, está pasando por un momento en que de alguna manera crees que puede serle útil. En otros casos, la persona que te comparte un libro quiere entregarte un mensaje entre líneas. 

Este libro me fue prestado en su momento, poco antes de salir del bachillerato, por alguien muy brillante e inteligente a quien yo estimo mucho. Le deseo el mayor éxito en esta nueva etapa que hemos comenzado, y que por más difíciles que resulten los obstáculos, tenemos la capacidad de sortear la adversidad y salir fortalecidos.

La vida es todo lo que tenemos y renunciar a ella es renunciar a todo. Vivir no es sólo comer y dormir, es salir adelante, por más difícil que esté la situación. Y precisamente de eso y más es de lo que trata el más reciente libro del que quiero hablar:

"Donde habitan los ángeles."

Escrita por Claudia Celis, "Donde habitan los ángeles" es una novela mexicana de corte educativa-autobiográfica. Nos cuenta la historia de Panchito, un niño que, tras unas vacaciones en casa de sus tíos abuelos en el pueblo de San Miguel de Allende, su madre ya no regresaría por él, por lo que desde entonces vivirá con sus tíos, quienes le enseñarán valiosas lecciones de vida y lo harán crecer como persona.

¿De qué va?

El tío Tacho y la tía Chabela, como los llama Miguel, solían recibir a todos sus sobrinos en su casa durante las vacaciones de verano, en San Miguel de Allende, pero un verano la madre de Panchito ya no regresó por él, así que Panchito se quedó a vivir en casa de sus tíos, sin saber que ellos se convertirían en unos padres para él, y él en un hijo para ellos.

A través de los capítulos, Panchito aprenderá lecciones de vida muy importantes gracias a sus tíos, desde no ser tan crédulo, el valor de la educación, aceptar a las personas tal y como son, perdonar; pasando por ser sincero con los sentimientos y sobre todo, entender el valor de la vida. No son pocos los momentos en el libro en que te puedes sentir identificado con las experiencias aquí mostradas. 

El libro está narrado en primera persona, de una manera amena y digerible, que, sin embargo, no deja de mostrar entre líneas la condición humana en cada uno de los personajes, así como los prejuicios sociales que hasta no hace muchos años (y que se siguen dando en muchas partes del país) eran muy comunes en la nación mexicana. Es con el apoyo de sus tíos que Panchito y los lectores aprenderemos a leer las experiencias de una manera más empática y objetiva, entendiendo las razones que tiene cada persona para comportarse y hacer lo que hace, y, además, entendiendo que nuestros actos tienen consecuencias y que debemos hacernos responsables de estas. Es la manera en que reaccionamos a las situaciones lo que forja nuestro carácter, lo que nos permite avanzar o quedarnos estancados en el pasado.

"¿Porqué?, ¿Porqué todos los que amo me abandonan?", dice Panchito en uno de los momentos más emotivos del libro, el funeral del tío Tacho, pero es gracias a el aprendizaje que tuvo con sus tíos que aprende que la vida es todo lo que tenemos, y que el renunciar a eso es renunciar a todo. El vivir realmente la vida, le explicó su tío, "el tomar en serio la responsabilidad de vivir, nos exige mucho más que respirar y comer. Es nuestro deber superar los obstáculos y salir adelante." 

¿Vale la pena?

La respuesta es un sí rotundo. Es uno de esos libros que en pocas páginas te dejan un gran aprendizaje. Te lleva de la risa al llanto y deja en ti ese sentimiento que dejan los buenos libros al terminarlos. Disfruté mucho el tiempo que pasé leyendo las anécdotas y reflexiones de Panchito con sus tíos. Es ideal para educar a los niños, pero puede ser leído a cualquier edad, ya que podrás identificarte fácilmente con alguno de los personajes que aparecen.

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Fomentemos la lectura.